Mi Familia es de Chernóbil…

La alegría de las reuniones familiares.

Sin ánimos de que la gente se revuelque y que piense que es un llamado de atención, créanme que con esta entrada muchos se sentirán identificados.  

Hace ya unos días estuve hablando con un amigo y compartimos de todo un poco; un tema que nunca falla es LA FAMILIA, reuniones familiares y demás.

Empezando a lo largo de los años que he crecido, he sido testigo, incluso he participado y he convivido con primos, tíos, y por supuesto yo siempre he sido la controversial de la familia. 

Al final comprendí (muchos anos después que es debido a la influencia de mi padre muy extrovertido y directo + el carácter de mi madre y que todo me resbale). Cuando era chica me afecto en muchas ocasiones, los comentarios mal intencionados, los…

1.       Massiel no se va a graduar
2.        Massiel se embarazara en X tiempo
3.        Massiel no tiene calificaciones como fulano…
4.        Massiel está loca (esta la escuché no una sino varias veces en mi cara).

ü  Y puedo seguir con un sinfín y no terminar.

Como siempre fui criticada, era como esa prima que la gente no soporta pero, lo hacían al fin y al cabo porque, mi mamá cocina muy rico, mi padre decía unos chistes espectaculares aparte que con mi papá nunca hacia falta las cervezas.

Al final me pregunté por años si es que había algo malo en mi porque cuando nos reuníamos, con amistades fuera del círculo familiar de verdad se veía que el cariño era genuino y sin críticas constantes.  

Luego cuando llegaron los años, fui madurando e incluso por mi propia salud, me alejé de todos porque si me hacían daño con sus comentarios y no me hacían feliz pues que pena NO SIRVO, NI SERVIRÉ PARA SER HIPÓCRITA.

Dejé de asistir a reuniones, no me interesaba visitar a nadie que no fueran mis abuelos (que eran unos santos) y saben que gané? Una paz inaudita, impagable y con la mejor armonía para seguir adelante.

Recuerdo, un día que estaba en mi casa un tío muy particular vino a visitarnos y que casualidad yo estaba en casa. A él le tengo una gran admiración pero, es muy zafado a veces con sus comentarios controversiales. Tenia muchos años de no verlo. En plena reunión sale con el comentario: “Massiel lo que pasa es que tu estas muy gorda…”

                               Saben ese sonido de 🛑 stop y ⏪ rewind?

En mi mente decia: WTF! 

Pues literalmente fue un paro en plena reunión y retroceso en la que yo respondí:

Perdón? Usted viene a mi casa, en mi espacio a decirme que YO ESTOY GORDA ?

La cara de mi tío, mi tía y mis padres eran este emoticón de WhatsApp con los ojos abiertos ----->😳😲

Después de ese momento en donde mi tío no sabía que decir, mi tía lo regañó y yo dije: "puedo permitir cualquiera cosa pero, que vengan a mi casa a criticarme es como demasiado no?" 

Eso si, después de ese interludio, mi tío quedó muy aleccionado más nunca me criticó porque no me he casado y que no tenga hijos.

Mi amigo me toco un tema muy particular de otra amiga que conocemos pero, tiene una familia mas tòxica que Chernóbil. 

Porque vamos chicos esto que cuento yo, pasa en tu familia y en todas las familias alrededor del mundo. Nadie absolutamente nadie escapa de esto.

Le dije que la única forma que uno deje de ser parte del círculo vicioso es apartarse. Puede que en un principio te tilden de ridículo, come mierda, falta de humildad, entre otras perlas más cuando digas que no cuenten contigo en la próxima reunión. 

Eso si cuando tu empiezas a decir la mítica y mágica  palabra del gremio del transporte selectivo: NO VOY…   

Ganas mucho, ganas paz, tranquilidad, evita disgustos, evitas líneas de expresión entre otros grandes beneficios tanto para tu salud en general y principalmente la mental.

Yo pienso que cuando la gente deje de sentir culpa y compromiso porque: 

“Es que fulano me ayudó en tal momento y aunque me caiga mal debo ir…” 

Uno debe aprender a pagar sus deudas morales, agradecer, compensar pero, no porque una vez te dieron la mano hace 20 años debas ir siempre que te compartan sus frustraciones y te critiquen.

Ahora ojo una cosa, es ser agradecido y otro es morder la mano que te ha dado de comer pero, eso es para otro capítulo.

Lo más sano siempre es no perder el tiempo porque uno no va a cambiar a las persona, de nada sirve que le digas a las personas que deben cambiar, antes de eso uno debe hacerse el análisis. 

Como para mi es muy desgastante y agotador estar en esas reuniones dejé de ir y punto. Soy mucho más feliz desde que comparto el amor real de mis amigas y de mis padres.

Yo sabía que nunca cambiaría a mis tíos y que cada vez que salía de una reunión con ellos yo me sentía mal por permitir que sus críticas me hicieran sentir mal. Por eso aprendí que esas no eran batallas que quisiera seguir librando y por supuesto perfeccione el que todo: ME VALGA VERGA.

Yo no puedo ser la terapista de nadie pero, si puedo darte confort y decirte que como tú familia, la mía y la de muchos es descendiente de Chernóbil de corazón.  ☢️☣️

Lo mejor es alejarse de lo malo, la vida es muy corta para amargarse por eso…

Cierro con la mejor frase que escuché de uno de mis favoritos El George Harris en stand up comedy:

“Yo decidí en mi vida: vivir de pinga… a ti no te gusta? 

Mámese un huevo… y me dispensan la mala palabra…”

Nos leemos en la próxima.

Xoxo.

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Anny aka Dama 9:

Perdedora por naturaleza, chistóloga frustrada, torpe con pies izquierdos, loca empedernida, de risa variable, estudie marketing porque me rechazaron en la Policía Nacional; después de dedicarme algunos años a ser Community Manager o Social Media Manager me jubilé. Ahora vivo una vida con mayor calma, disfrutando de la escritura por afición. Amo comer, reír, leer, el olor del café, la lavanda, el mar, los amaneceres a pesar que me cuesta levantarme y los atardeceres me matan.