No debería decir que siento mucho que se enteren de esta manera pero, así soy yo ahora y poco pueden cambiarme o reprocharme. Si en estos momentos quieres dártelas de víctima reclamando que:
- No haya querido decir nada y...
- Pienses que he actuado mal pues déjame decirte que, lo nuestro no era una amistad real!
Empezando por el principio quiero recordarte, si me conoces que el número mío no lo cambié. Si tuve una que otra línea extra pero, el número siguío siendo el mismo. Ahora te invito a preguntarte:
—¿En algún momento pensaste en escribirme?
—¿Cuándo fue la última vez que tú y yo hablamos en persona?
—¿Cuándo fue la última vez que tú y yo hablamos en persona?
Soy muy anticuada pero, mi profesión o la que he estado ejerciendo los últimos 6 años de mi vida me hace recordarte que si el whatsapp y todas esas apps molan, pero no se compara al reunirte con la persona, saber ¿cómo está?, darle un abrazo que no acabe nunca y decirle lo mucho que la quieres. Soy una anticuada de pies a cabeza pero, hoy más que nunca me ha quedado claro y espero entiendas mi posición. Muchas veces nos excusamos y decimos: “ No tengo tiempo” ó “No puedo el tiempo no me da” y cuando vuelves a ver el tiempo pasó tan rápido que la única manera de saber si esa persona sigue viva o no es porque te dijeron que mañana es su sepelio a “X” hora.
Luego te respondes y dices:
—“¡Coño! si Mario estaba bien, había subido un estado ayer, no más”
—“¡Coño! si Mario estaba bien, había subido un estado ayer, no más”
Ahí comprendemos que el tiempo es irrelevante y la excusas nuestra arma para evitar salir de la comodidad de nuestra zona de confort. Ya por último quiero decir que no te culpo para nada mi corazón y mi aprecio hacia ti sigue intacto. En mi nueva vida siento que incluso sientiendo algo malo para ti no tiene sentido porque, es pérdida de tiempo y señores el TIEMPO es oro.
Hace un año aproximadamente un amigo que hoy en día pongo en tela de duda me dijo muy campante lo siguiente:
<<Te vas porque quieres huir...>>
Hoy me atrevo a responderle:
—No, amigo/ no-amigo, lo que pasa es que ya yo viví, cumplí todo lo que la sociedad y familiarmente hablando me exigía. Me sentía CONFORME pero, no era feliz.
Para que no se me mal entienda, tampoco es que era una infeliz, NO señores pero, estuve clara que algo me hacía falta. No era casarme, no era tener hijos, no era trabajar de lo que al fin había estudiado, no era comprar un auto, tener tarjetas a tu disposición o saber que tenías una propiedad. No, nada de eso me llegó a llenar...
“Muy al fondo a la izquierda” como hablan de los baños sentía que vivía por vivir pero, no como deber ser. Ahora dirás: —“Anny esa hierba que te fumaste no está bien, uno debe dejar la Droga por que es mala” y yo te respondo:
—No, el que está mal es usted si cree que la felicidad se basa en cosas materiales o complementándose con otra persona. ¿Dónde está tú felicidad?
Esa que no nos enseñaron en la escuela porque se trata de manera efímera pero, que a veces se entiende mal y piensan que eres tan egoísta que eso ¡no! NOS lo enseñaron en la escuela y eso es PECADO.
Ahora yo no cambio a nadie señores, “ Árbol que nace torcido...” sólo menciono un poco las reflexiones y el tiempo que me llevó tomar ésta desición.
Un día después de despertar de un letargo de medicamentos y de abrir los ojos a la VIDA me dije y me pregunté lo que muchos temen, que son las crisis existenciales: ¿QUÉ CARAJOS ESTOY HACIENDO CON MI VIDA?
Cuando uno se pregunta esto y ya sabe que uno no tiene ni 15 años, ni 20 años, ya uno se empieza a preocupar.
A nadie le voy a metir que por años: no he creído en mí, jamás me he dado un peso a mi misma e incluso siempre apuesto en mi contra. Son años de inseguridades abonadas por casos y cosas, por una vida que me tocó madurar tan rápido y darme cuenta que Santa Claus no existe! Sumémosle una infancia poco habitual, aprendiendo la diferencia entre una Wrurlitzer y una Ami* o de un destornillador estrella versus uno plano, en fin puro confetti pues...
¿Me siento avergonzada de eso? Deben preguntarse y les diré que ¡NO!.
Me siento tranquila de pensar que era más importante para mí era tener el manteniemiento del carro mío en punto a hacerme unas manicuras o una sesión de SPA. No les digo que no me guste pero, aprendí a priorizar cualquiera otra cosa menos en mi misma.
Volviendo al punto de no creer en mí, siempre pensé que no valía la pena seguir estudiando y que si me había equivocado de carrera, como siempre digo en chistes; que esconden verdades. No valía la pena volver a empezar como ¿Para qué?. Por años escondí los certificados, premiaciones y demás logros porque le respondía a mi madre: “Es un papel y de papel no se vive”.
Por años me manejé y aprendí a mimetizarme tanto que esto de hacerme la tonta era muy gracioso porque, muchos se la creían. Hasta que llegaba alguna persona que me conocía bien y me quitaba la careta y decía: “A mi no me engañas”. Me bañé por años en el mar de la tranquilidad y el conformismo que apagué el interruptor de la confianza y simplemente viví por vivir...
Hace un año atrás cuando mi vida empezaba de nuevo me aferré a las ganas de empezar de nuevo y de arriesgarme a lo grande. Para nadie es un secreto ya, que en esa ocasión las cosas no se dieron y bueno lo demás, es historia.
¿Cómo no me volví loca, si lo único que pasaba en mi vida era cosas negativas? Ni yo lo sé, sólo sé que me cansé, recogí los pedacitos de mi y bueno a lo hecho pecho...
Aprendí cosas malas de esa vez como por ejemplo:
- Todavía creo que las cosas que te van a hacer feliz, no se dicen... pero, principalmente en la familia.
- Desconfiar un poco, sólo lo suficiente para tener planes alternos.
- Ahorrar, ahorrar, ahorrar maldita sea!
Hace meses atrás había recibido una llamada que me decía: !Hey se cerro la puerta¡ pero, hay una ventana.
A mi no me da pena decir que cuando todo lo perdí lo único que llenó mi mente es como tomar represarias o por así decirlo vengarme.
Y ahora no se hagan los ofendidos... no soy la primera ni la última en despertar odiando mi trabajo y que su jefe/a que muera con cicuta, amoniaco o algo parecido en su taza de café o las más sencillas como el tan famoso remedio mio: el azúcar en la la boquilla de despósito de gasolina.---->
<<hace unos meses me hablaron de las maravillas del líquido de freno en la pintura de un carro>> pero, siempre me frenaba porque me acordaba de la plata invertida de mis pobres padres en escuelas privadas y religiosas! Sí, señores si al final si era buena y encima PENDEJA.
El punto es que con una madre adolorida, una hija resentida y con amenazas al mero estilo de loca Mexicana: ¡Si no es conmigo, no es con nadie, maldito NANDITO! -----> sal de este cuerpo Soraya!
Decidimos retomar las negociaciones, casi incrédulas las Dos. Aunque mi madre no es muy fanática pero, debo decir que ella lo creyó al 100% que esta vez me iba a pasar como la Reina de Tonosí: “De que te vas, te vas”, ¿Cómo?, no lo sé, pero te vas!
Meses en los que me pregunté si valía la pena volver a subir y bajar escaleras. Mentalizándome que debía ser fuerte, mucho, muchísmo, tener mucha paciencia casi inquebrantable y segura que si no se cumplía en esta ocasión es mejor que temieran...
Saben... uno en esta vida debe preocuparse cuando una persona te dice:
—“Ya no temo a nada porque ya todo lo perdi”.
Eso señores es para reflexionar, temer y mantenerle respeto. Porque si al perderlo todo no se fue su juicio, señores: o es kamikaze o ya no le importa nada!
Hay un agradecimiento que me quedará corto que son a mis amigas: Esas malditas infelices que me quieren aunque, una siempre me diga: —¡Qué ordinaria eres!
Y la otra diga: —Anayansi Massiel Gobea, ¡No empecemos!
Ellas siempre estuvieron seguras que por muy mala sangre o maldita que haya sido. Siempre creyeron que ya merecía algo para mi. Ya no sé como darles las gracias a ustedes por soportar mi extraña forma de ser. Hay un ángel que entró después al rescate y me dijo: creo en ti y creo que lo mereces. Sin ti, tampoco nada de esto fuera real.
Cuando inicié meses atrás esta etapa de desprenderme, tuve dudas muchísimas como por ejemplo: ¿Qué iba a hacer con la cantidad estúpida de libros que me quedaban? Ya hoy en día puedo decir con total franqueza: Están en mejores manos...
Mis padres, wao fueron los primeros en creer en esto, en mi y en empacarme las cosas para que al fin no muera con el tan temido “y si...”, ellos saben que si hubiese una manera de pagarles Dios sabe que lo haría con creces!
Mis chicas K-pop una en especial me dijo hace días: “Anny esto tiene un mensaje, una razón de ser y es momento que creas o vuelvas a creer.” Gracias por tus consejos sin ti, no estuviera tan centrada como lo aparento jejeje.
Mi madrina, ! Santo padre! ¿Qué haría yo sin ella? Cuando muchas veces no lo pedí ella siempre me entendio, me decía que me quería y ya estaba.
Por último debo agradecer a mi pareja favorita de la vida real y son mis Cubanos: Sé que ustedes, su positivismo, sus rezos y su amor no hubieran condensado esto y ella sabe que le cumpliré a él usando ese billete que me dio...
Cuales son las reflexiones finales que les dejo:
- No esperes a conformarte con saber de alguien por redes, míralo, haz un espacio porque nunca se sabe cuando lo vuelvas a ver.
- La vida son sólo 2 días...
- Busca tu felicidad, no la que dice la sociedad, no la que dicen tus padres, si no la tuya propia.
- Brinda abrazos de verdad, no esas porquerías de ahora...
- No te apegues a lo material.
- Que el centro de tu vida, seas tú.
- Nunca es demasiado tarde.
- Que si hay que empezar de cero, por lo menos sabes que errores no cometerás más.
- Que no está malo llorar cuando se debe.
- Que hay que pedir ayuda cuando sientas que no puedas.
- Selecciona a la gente en tu vida
- Se cuidadoso en redes sociales ---> te lo dice una community manager.
- Si recuerdas de donde vienes siempre, no perderás la escencia.
- Y aprende a dar gracias, aunque el maldita cajera de supermercado te trate de las patadas!
Ya sin alargarles más la duda: sólo empaqué 2 maletas y una mochila muy al estilo “mochilero” muchas ganas de empezar y con la incertidumbre latente porque nada está escrito en piedra, ya hoy en día me dejo llevar de la marea.
Sólo deseo que puedas entender sólo un poco, desear mucha buena vibra y recordarte que estaré siempre en mis redes sociales por si quieres pasara darme un besito o mandarme el emoticón del corazón.
Sin más...
Atte; Anny
- Wrurlitzer/ Ami: son marcas de traganiquel o máquinas traga monedas con múisica en formado de LP 45” que se comercializaron y estuvieron On-Point en los 80´s, era muy común verlo en balnearios, discotecas, bares u otros *
Xoxo.
***
Anny aka Dama 9:
Perdedora por naturaleza, chistóloga frustrada, torpe con pies izquierdos, loca empedernida, de risa variable, estudie marketing porque me rechazaron en la Policía Nacional; después de dedicarme algunos años a ser Community Manager o Social Media Manager me jubilé. Ahora vivo una vida con mayor calma, disfrutando de la escritura por afición. Amo comer, reír, leer, el olor del café, la lavanda, el mar, los amaneceres a pesar que me cuesta levantarme y los atardeceres me matan.
Conoce más de mi en mis redes:
Te amo querida, sé feliz. Muchas buenas vibras ����
ResponderBorrarPrimero tú, segundo tú y tercero tú. Suena egoísta, pero así es, nadie será feliz por ti, no podemos dar lo que no tenemos. Disfruta, ama y vive. Eres una buena mujer, una mujer valiosa.
P.D. Las máquinas traganiquel, cómo olvidar sus cuentos.
Con amor, Cinthia
Amiga al fin conecto mi Pc, gracias por tus buenos deseos y amor! Te quiero, recuérdalo siempre !
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